Shrimp Market en La Sastrería

El sábado por la noche fui con I, L y R a un espectáculo de stand up en Shrimp Market en La Sastrería. El lugar está en la Roma Norte, en Medellín 194, para ser más exacto.

El lugar está bonito, pero no es nada del otro mundo. Y, a decir de R (que es de esos arquitectos obsesivos que se la pasan analizando los edificios que visitan) en varios aspectos "está fuera de reglamento".

Tomada de Cool Huntermx

Antes de ir revisé un artículo en línea de Cool Huntermx en el que describían y halagaban el diseño de los muebles para este restaurante, hecho por el taller de diseño Cardumen. A pesar de lo bien que se habla en el dicho artículo, los muebles son incómodos y poco prácticos. No nos gustaron.

El servicio fue malo en lo general. Una vez que nos instalamos en la mesa que nos asignaron en la terraza, idónea para presenciar el espectáculo de comedia, tardaron demasiado en entregarnos las cartas y solo nos las llevaron cuando la mesera se apersonó para preguntar si las queríamos revisar. Eso no se pregunta, las cartas se entregan a los comensales sí o sí. Lo bonito es que sí nos dieron una cerveza de cortesía, lo equis es que eran Coronas. Ah, y nos entregaron solo las cartas de alimentos, así que cuando preguntaron qué bebidas queríamos ordenar, pues no teníamos ni idea de lo que se ofrecía.

El menú es variado y se lee apetecible. I pidió unos tacos de pulpo y otros de camarón, L una ensalada de camarones, R una pizza y yo un aguachile.

La pizza llegó como a los quince minutos de haberla ordenado. Para acompañarla ofrecieron tres salsas: de chiltepín, la de la casa y una agridulce. La que más se defendía es la de la casa. La pizza es preparada en horno a la leña y es altamente recomendable. El resto de la comida llegó más de treinta (casi cuarenta) minutos después, no sin antes haberle preguntado un par de veces a la mesera por nuestros alimentos.

Los tacos llegaron fríos. La tortilla se estaba rompiendo por el medio y eso no es bueno en un taco. El pulpo sabía mal sazonado. La ensalada no era gloriosa, ni terrible, sino más bien todo lo contrario. El aguachile estuvo bueno, pero tampoco fue glorioso. Creo que lo que más me gustó fue la naranjada. Definitivamente no volvería a Shrimp Market.

Y respecto al espectáculo, antes del stand up hicieron música dos jóvenas, una cantaba más o menos y la otra hacía acordes básicos en su guitarra. La comedia estuvo buena, se trataba de la graduación de l@s alumn@s de Gloria Rodríguez, así que, con sus asegunes, fue un agradable show.