Ya párenle al mame con su defensa de Aristegui

Banda, voy a emitir mi comentario acerca del despido de Carmen Aristegui de MVS y las subsecuentes reacciones en los medios tradicionales y en las redes sociales virtuales. Y seguramente no les va a gustar.

Hasta donde he seguido la nota el asunto estuvo así: a Carmen Aristegui le pareció buena idea entrarle a Méxicoleaks usando el nombre de MVS, pero MVS no es de ella. Entonces sus jefes, que sí son dueños de MVS, decidieron retirarla de su puesto de trabajo debido a que la periodista cometió abuso de confianza. Después la gente se opuso al despido de Aristegui, se hizo un escándalo en las redes sociales virtuales y hasta se fueron a manifestar unos dos mil sujetos. Se ha dicho que están coartando la libertad de expresión. Que no se trata de un asunto entre particulares. Y que la mano de Peña Nieto se ve tras todo este asunto.

Por partes. Carmen Aristegui no es la única persona que puede hacer uso de la libertad de expresión, por lo tanto su despido no es un atentado a esa libertad. Carmen tampoco es la única periodista a la que han apartado del micrófono por ser incómoda, pero sí es a la que menos mal le fue. Tristemente en México han sido asesinados más de cien periodistas en lo que va del siglo (desde el 2000 pues). Eso sí es limitar la libertad de expresión. Aristegui aún puede hacer uso de otros medios, aún tiene voz, aún se tiene a sí misma. Sí, sí hubo abuso de confianza, uno no anda por la vida usando las marcas y empresas de los demás, por muy loable que sea el asunto en el que se esté involucrando, eso no se hace sin pedir el visto bueno de los propietarios. MVS puede despedir a quien se le antoje, y si es injustificado pues se le demanda y se le pide una indemnización, pero de que puede, puede. Y sí, sí es un asunto entre particulares, una relación laboral interrumpida entre una persona física y una moral. Así de simple. ¿Que la mano de Peña Nieto fue la que movió los hilos? Puede ser, pero en realidad su mano está en todos los medios, ¿por qué llamar la atención en este caso y no en el de las decenas de periodistas asesinados o los que han sido cesados de sus puestos en otros medios?

La verdad es que la actitud de la señora Aristegui me recuerda mucho a la de AMLO y su imperiosa necesidad de creer que todo es un compló en su contra. Y que quede claro que no estoy criticando su labor periodística, de la cual soy seguidor.

En fin, a ver si se acaba pronto este desmadre.

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